"Jesús quiere que vivamos unidos"

Juan 17, 21-24

La semana pasada Dios nos invitaba a tener ese contacto con su palabra para conocerlo y dar frutos de Amor y solo lo lograremos con los ojos fijos en Jesús.

“Que todos sean uno, como tu Padre estas en mi y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tu me enviaste…”.

Y le preguntaba al Señor ¿Tú estas en mi? ¿Me creo que estas conmigo todos los días de mi vida? Que estás presente en la Eucaristía y que al recibirte te vas conmigo a donde vaya y haga lo que haga trabaje, estudie, los quehaceres de la casa, etc.; en las situaciones que nos toca vivir, problemas económicos, problemas de salud, falta de trabajo, falta de comunicación, problemas conyugales, etc.; ¿me creo realmente que tu Señor estas allí, que me quieres decir algo, como tengo que actuar?. Fue hermoso reconocer que el Señor siempre actúa en nuestras vidas si lo dejamos y que nada soy sin El, conocerlo es lo mejor que nos puede pasar en la vida.

Y me invitaba a Amar con su mismo Amor, a perdonar, a ser uno, ósea así como el cuerpo tiene varios miembros y es un todo, así tengo que ser ese miembro de Cristo que necesita estar unida a El para que el mundo crea que el Padre a enviado a Jesús.
Cuando el mundo vea que vivimos unidos, amándonos, perdonándonos, comprendiéndonos, siendo fraternos y siendo felices podrán decir quiero seguir a Cristo quiero imitar su vida.

Pero, ¿Cómo se puede vivir unidos cuando muchas veces en casa se vive con la familia y ni nos enteramos como están, ni sabemos nada de sus vidas, sus sufrimientos, sus heridas; por diversas razones por el tiempo el trabajo, etc.; mas aun en nuestro trabajo a veces ni conocemos a nuestros compañeros o solo conversamos con el que nos cae bien, en la comunidad ni conocemos a todos los hermanos y en los estudios solo nos juntamos con el chancón?. ¿Cómo nos pide Dios estar unidos cuando en las noticias solo se ve corrupción, muertes, guerras, violaciones, robos, etc.; mucho sufrimiento?

“…Yo en ellos, y tú en mi para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tu me enviaste y que los has amado a ellos como a mi también me has amado…”

Justamente nos invita a estar unidos en Oración y a ser perfectos en el Amor, es decir a AMARNOS y rogar por todos aquellos que viven alejados de su palabra, por todos, todos que no conocen al Dios de la Vida, a aquel que nos AMA hasta el extremo.

“…Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo”.

Estamos llamados a ser palabra de Dios, a transmitir el lenguaje del Amor, a llevar el Evangelio por todo el mundo, no solo Él estará con nosotros, sino que donde Él vaya nosotros debemos ir y solo lo lograremos permaneciendo en su Amor y solo así tendremos esa calidad de vida, esa unidad que nos pide, porque El nos Amó primero desde el vientre de nuestra madre y todo lo que hagamos: predicar su palabra con la vida y la palabra sea para gloria del Padre y de Jesús no la nuestra.

Que el Señor nos enseñe escucharle, asimilar lo que nos dice y a vivir lo que El quiere, a hacer su voluntad porque eso nos hará feliz, más la nuestra no nos conviene.
Madre enséñanos a permanecer unidos a Cristo para vivir en fraternidad y el mundo crea.

Claribell.