Vernes 18 de Enero 2008
Gálatas 4,7
"Así pues, tú ya no eres esclavo sino hijo de Dios y por eso Hijo suyo, es voluntad de Dios que seas también su heredero"
Al comenzar la oración le preguntaba al Señor que me ayudara a identificar de que cosas soy esclava y el me hacia ver que mi miedo era mi principal carcelero ese miedo que no me deja avanzar, ese miedo que no me permite confiar en mi, mucho menos en El, le preguntaba al Señor como me libero de esa esclavitud, me contesto entregándosela que a través de la oración me ayudaría a transformarla en seguridad que tuviera fe en El.
Al mismo tiempo yo le pedía al Señor perdón por mi desconfianza por que el enojo que tengo va siempre hacia El, sin ver que soy yo la que tengo que poner de mi parte para que el me ayude, le pedía perdón porque no me sentía hija suya aun cuando hay motivos de sobras para saborear el ser hija de Dios, y me hacia ver que todo tiene su proceso en la vida que no me preocupara que le pidiera a la Mamá María que me enseñe a ser hija a ser hermana, amiga que solo una madre puede ayudarnos a ser hijos y sentirnos hijos de Dios
Liliana
viernes, 18 de enero de 2008
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